Un buen seguimiento también significa ahorrar

Cuando los ingresos se ven afectados, puede ser estresante pensar en eliminar gastos que no entran dentro del presupuesto, pero no debemos engañarnos al pensar que el autocuidado de la diabetes es un gasto que no deberíamos hacer.

¿Alguna vez dejó de acudir a una cita médica, midió su glucosa con menor frecuencia para ahorrar tiras reactivas o incluso omitió algún medicamento para ahorrar dinero?  Usted no está solo; esta decisión es muy común cuando el dinero no es suficiente pero aun cuando estas prácticas pueden ahorrarle un poco de dinero al principio, pueden tener efectos serios y más costosos a largo plazo. Después de todo, no es comparable el costo de una caja de tiras reactivas o una visita al médico a  una estadía en el hospital o el costo del tratamiento de algunas complicaciones: enfermedad renal, problemas cardíacos o infecciones recurrentes.

Además, dejar que su nivel de glucosa en sangre se mantenga elevado puede causar fatiga, visión borrosa y  otros síntomas que no lo ayudarán para llevar a cabo sus actividades diarias; su desempeño diario será menor.

Una forma de ahorrar dinero a largo plazo es mejorando el control de sus niveles de glucosa en sangre y de su salud en general, lo cual significa volver a lo básico:

• Comer mejor.  Cocinar en casa puede ahorrarle dinero y también le permite llevar a una alimentación más saludable.
• Volverse más activo.  Una caminata al día es una forma gratuita de contribuir a reducir sus niveles de glucosa en sangre.
• Consultar a un educador certificado en Diabetes o a un Nutriólogo, o tomar un curso de educación sobre la Diabetes para repasar sus conocimientos y habilidades de autocuidado de este padecimiento, especialmente si  su servicio de salud o seguro de gastos médicos lo cubre.

Si se le dificulta llegar a sus metas, no cambie ni reduzca su plan de autocuidado por su cuenta.  Consulte a su médico para que le brinde otras opciones, como:

• Un cambio en su plan de autocuidado o prescripciones
• Centros de salud comunitarios o clínicas gratuitas
• Planes de pago o programas de bajo costo
• Apoyo local para atención en salud, medicamentos y pruebas de glucosa​

Recuerda que tu médico es el único facultado para recomendarte lo mejor para tu salud.